Entra para respirar aire fresco

La contaminación del aire interior no es nada despreciable. Los problemas de salud derivados de la mala calidad del aire interior cuestan miles de millones de dólares cada año y reducen la productividad. Si su ambiente interior se siente un poco obsoleto, comience de nuevo centrándose en el mantenimiento y el diseño del sistema de ventilación. Mejorará la salud y la comodidad de sus instalaciones y aumentará sus resultados.

Calidad, salud y productividad del aire interior

La contaminación del aire interior es causada por la acumulación de contaminantes que provienen principalmente del interior del edificio. Las fuentes comunes de contaminación del aire interior incluyen organismos biológicos, materiales de construcción y mobiliario, agentes de limpieza, fotocopiadoras y pesticidas.

Estos contaminantes pueden contribuir a enfermedades relacionadas con la construcción que tienen causas claramente identificables, como la enfermedad del legionario. Los sistemas de ventilación mal mantenidos pueden contribuir al Síndrome del Edificio Enfermo, que produce síntomas físicos sin causas claramente identificables. Los síntomas comunes incluyen irritación de ojos, nariz y garganta.

Estos trastornos conducen a un aumento de los días de enfermedad de los empleados y a una reducción de la eficiencia laboral. La Organización Mundial de la Salud estima que el 30% de los edificios nuevos o remodelados tienen tasas inusualmente altas de problemas de salud. El Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional identifica la mala ventilación como un factor importante que contribuye a muchos casos de edificios enfermos.

Problemas y soluciones del sistema de ventilación

El sistema de ventilación mueve el aire dentro y fuera de su edificio. Cuando el sistema no funciona correctamente, la calidad del aire interior puede deteriorarse. Aumentar la cantidad de aire exterior es la solución más común, pero una serie de problemas operativos y de diseño del sistema pueden afectar a su entorno interior.

•    Flujo de aire variable. Los diseños que especifican el funcionamiento del sistema HVAC con un flujo reducido o interrumpido en respuesta a las necesidades de acondicionamiento del espacio pueden perjudicar la eliminación de contaminantes. Defina las tasas mínimas de ventilación por limpieza y distribución del aire, así como por temperatura y humedad.
•    Colocación de ventilación. Los respiraderos de suministro de aire ubicados cerca de fuentes de contaminación, como respiraderos de escape, áreas de tráfico pesado y contenedores de basura, proporcionan un camino para los contaminantes. Evalúe cuidadosamente la ubicación de todas las rejillas de ventilación del suministro de aire.
•    Distribución de aire. Asegúrese de que las cajas registradoras no estén bloqueadas por muebles o equipos y que las particiones u otras barreras estén colocadas de manera que no restrinjan el flujo de aire. Ubique las rejillas de ventilación de suministro y retorno de aire a una distancia razonable para garantizar una distribución equilibrada del aire.
•    El tratamiento y la remediación del aire pueden reducir la concentración de contaminantes. La luz ultravioleta (UV) puede mantener las bobinas del evaporador libres de la acumulación de moho y hongos. Los iones producidos por los dispositivos de descarga de plasma inducen a las partículas a coagularse o pegarse entre sí, lo que las hace más grandes y más fáciles de atrapar para el filtro.
•    Programación. La programación del sistema de ventilación es fundamental para mantener una buena calidad del aire interior. Programe el funcionamiento del sistema en función de los niveles de ocupación o las horas de funcionamiento. La ventilación con control de demanda mediante sensores de CO2 o COV puede optimizar la calidad del aire interior y ahorrar energía. Monitoree la calidad del aire exterior según lo exigen los códigos de construcción ecológica.

Preste mucha atención a estos problemas y detectará rápidamente las posibles fuentes de contaminación del aire interior y tomará medidas para eliminarlas.

Manténgalo fresco

La optimización de la calidad del aire interior requiere un monitoreo continuo y un compromiso con la mejora continua. El mantenimiento de registros también es importante. Consulte Gestión de HVAC para una mejor calidad ambiental interior de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades para obtener más información sobre el diseño del sistema de ventilación, así como configuraciones y controles que pueden ayudarlo a crear un entorno de trabajo más productivo y saludable. Manténgase actualizado sobre los cambios en el código o las revisiones de los estándares de ventilación.

Para obtener más información sobre cómo actualizar su sistema HVAC, visite nuestra página web del Programa de rendimiento personalizado en ladwp.com/cpp.